segunda-feira, fevereiro 05, 2007

Violeta Parra - 40 años de su muerte


Violeta del Carmen Parra Sandoval (* San Carlos, 1917 - † Santiago, 1967) es una música, cantante, pintora, escultora, bordadora y ceramista chilena, considerada por muchos la folclorista más importante de Chile y fundadora de la música popular chilena. Es miembro de la prolífica familia Parra.

El aporte de Violeta Parra al quehacer musical y artístico chileno es considerado de manera unánime como trascendente e invaluable. Su trabajo sirvió de inspiración a un sinnúmero de artistas posteriores a ella en el tiempo, que continuaron con su ardua tarea de rescate de la
música del campo chileno y las manifestaciones constituyentes del folclor del país y de Latinoamérica. Sus composiciones propias han sido elogiadas por críticos de todo el mundo, debido a su complejidad y elaboración musical y a sus letras poéticas, ingeniosas y comprometidas. Sus canciones han sido versionadas por un sinnúmero de artistas en Latinoamérica y el resto del mundo.

Los graves problemas económicos se agravan en gran medida cuando el padre de familia fallece en 1929. Invitada por su hermano Nicanor, que desarrolla estudios en la capital de Chile, Violeta marcha a Santiago a los 15 años. Mientras estudia en la Escuela Normal de Niñas, decide que el canto puede convertirse en una forma de hacer dinero y ganarse la vida. Comienza a presentarse en bares, quintas de recreo y pequeñas salas de barrio, junto con su hermana Hilda, en un dúo de música folclórica llamado Las Hermanas Parra.

Así, en 1953 graba los exitosos sencillos "Casamiento de Negros" y "Qué Pena Siente el Alma", que se convierten en dos de sus canciones más conocidas. Al año siguiente, mantiene en la Radio Chilena el programa Canta Violeta Parra, y gana el Premio Caupolicán a la folclorista del año, lo que le vale una invitación para presentarse en un festival juvenil en Varsovia, Polonia.
Aprovecha este viaje para recorrer la Unión Soviética y partes de Europa. Es muy provechosa su estadía en París, ya que allí graba sus primeros larga duración (Guitare et Chant: Chants et Danses du Chili, editado en 1956 y una serie de canciones grabadas que se editarían en diversas compilaciones posteriormente), que incluían exclusivamente canciones recopiladas del folclore chileno. El éxito obtenido en Europa es inédito para cualquier artista chileno, Violeta se llena de inspiración y creatividad.

Sin embargo, estando en París se entera de la muerte de su hija Rosita Clara. En 1958 regresa a Chile, y posiblemente para sobreponerse a esta tragedia, su actividad artística se vuelve interminable. Cuatro discos suyos aparecen en ese mismo período (Canto y Guitarra, 1957; Acompañada de Guitarra, La Tonada y La Cueca, todos de 1958)

Los discos son grabados con el mínimo acompañamiento de una guitarra de madera, y en la actualidad se encuentran descontinuados, al igual que su álbum editado en Argentina (donde se censuró su polémica canción social "Por Qué Los Pobres No Tienen") y el álbum Toda Violeta Parra, lanzado en 1960.
Además, su actividad artística comienza a diversificarse: trabaja en cerámicas, pinturas al óleo y arpilleras. Trabajó un tiempo en un museo de arte popular y folclórico que ella misma fomentó a crear en la Universidad de Concepción y luego viajó por casi todo Chile, ofreciendo cursos de folclore y recitales.

Violeta se siente más apreciada en el extranjero que en su propio país. Entre 1961 y 1965 reside en Francia, continuando con su intensa actividad artística y constantes recitales, siempre intentando difundir el folclore chileno. Su residencia en París le sirve para lanzar al mundo del disco a sus hijos Ángel e Isabel

En 1965 Violeta regresa a Chile. Instala una gran carpa en la comuna de La Reina, con el plan de convertirla en un importante centro de cultura folclórica, junto con sus hijos Ángel e Isabel, y los folcloristas Patricio Manns, Rolando Alarcón y Víctor Jara, entre otros. A pesar de su bello sueño de convertir la carpa en un referente para la cultura de Chile, la respuesta no es muy motivadora, y el público no la apoya.

La incomprensión del público chileno es uno de los factores que desencadenaría el terrible final de su vida. El final de su relación con Gilbert Favre, que se marcha a Bolivia en 1966 (originando una de sus canciones más conocidas, "Run Run Se Fue Pa'l Norte") la deja en un estado de ánimo muy vulnerable. Las últimas canciones que escribe se reúnen en el notable disco Las Últimas Composiciones, lanzado ese mismo año, y que incluye sus himnos humanitarios "Gracias a la Vida" y "Volver a los 17", además de otras canciones igualmente importantes y conocidas, como el "Rin del Angelito", "Pupila de Águila", "Cantores Que Reflexionan" y "El Albertío", famosas hasta el día de hoy. El álbum, grabado junto a sus hijos y al músico Alberto Zapicán, sería lo último que grabaría.

El 5 de febrero de 1967, a los cincuenta años de vida, y luego de varios intentos fallidos, Violeta Parra termina con su vida en la carpa de La Reina.

Hoy 40 años de muerte....


Freyja

6 comentários:

Nokitas disse...

Uma grande CHILENA!!!!

Amiga de Pablo Neruda, apoiava a esquerda chilena, inclusive Salvador Allende.
Através da pintura exprimia o lado triste da vida. Através da tapeçaria exprimia o lado feliz da Vida.

Uma mulher inesquecível.

susana disse...

Ela ficaria feliz por saber que pessoas como tu se lembrarem dela, neste dia da sua morte!Há pessoas que nunca morrem, emquanto existirem pessoas que as trazem no coração e na memória!
beijos miss

Axiológico disse...

UM BRINDE ESPECIAL PARA ELA !!!!!!!

RICO FILHO disse...

una gran mujer y artista

BREDAMAGIA disse...

gusta su musica

Marco Gata disse...

viva la violeta eternamente